Sobre los perros sueltos

Quiero comentar en este artículo el problema que tenemos los perreros para encontrar lugares donde poder soltar con tranquilidad a nuestros amigos perrunos. Como educador canino, cuando voy a sesiones con mis clientes, siempre les comento lo importante que sería encontrar un lugar adecuado para poder pasear con el perro suelto.......pues pienso que pocas cosas hay mejores para el equilibrio emocional y físico del animal que un largo paseo por el campo.

En muchas ocasiones me encuentro con la dificultad de que mis clientes viven en zonas muy pobladas y sin lugares para soltar al perro de manera segura......por lo que no tenemos más remedio que adaptarnos y complementar las terapias con pautas que contraresten esta dificultad añadida.

Para mi es una suerte vivir en la sierra......pues tengo campo a mano para poder llevar a mis perros a que disfruten. Aunque, ciertamente, he tenido que capear algunas discusiones con personas que se sienten molestas con la presencia de perros. Voy a aclarar que mis perros no molestan a nadie.......solo saludan a personas que se dirigen a ellos (a veces ni eso) y no se acercan a molestar a nadie......lo cual me permite a mi pasear muy tranquilo y despreocupado. Pero si me ha tocado discutir con cazadores que me increpaban por llevar a los perros sueltos en coto de caza (y monte público......sea dicho de paso). Su argumento suele ser que está prohibido al ser coto de caza.....y que solo ellos tienen derecho a llevar el perro suelto. Tal cosa no es cierta........y, tratando de razonar (a veces con dificultad) les explicaba yo que la ley de caza vigente en Madrid (ley 1/1970) dice que el perro tiene que ir "controlado" y que se considera controlado si va a 50 metros en zonas con visibilidad y a 15 metros en zonas sin visibilidad por la vegetación. En fin........pensaba yo, en estos casos, que tenía bemoles que me tuviera que acoger a una ley del año 1970, cuando el uso recreativo de los montes era casi nulo......con un artículo destinado, más bien, a evitar el furtiveo (los furtivos se desacían de la escopeta en cuanto aparecía el guarda.........y alegaban estar paseando al perro.......por lo que el legislador pensó en ponerles sanción de cazar sin licencia por el mero echo de llevar perro de caza a más distancia de las que especifica el artículo).

Bueno......como siempre me enrollo........ Inocente de mi, esperaba que este tipo de situaciones sería resuelta en cuanto aparecieran normas más modernas que trataran de compatibilizar los múltiples usos que hoy tiene el medio natural. En un fin de semana madrileño se pueden juntar en la sierra seteros, ciclistas, montañeros, corredores, esquiadores, paseantes con perro...........y todos por cientos.

Mi sorpresa ha sido que el PORN (Plan de Ordenación de los Recursos Naturales) del Parque Nacional de la Sierra del Guadarrama, prohibe, de manera expresa, perros sueltos en todas las áreas del parque, excepto las de transición............osea que, olvídese de pasear al perro por los montes públicos que abarcan desde El Escorial hasta Gascones......Para mi, un disparate.

El motivo de escribir hoy el artículo es que he tenido la oportunidad de hablar con uno de los técnicos de medio ambiente que se ocupan de controlar el uso público del Parque Nacional.......y, ante mis alegaciones sobre la norma, dice que la ve normal.....que los perros no deberían ir sueltos por ningún sitio.......ni en campo ni en ciudad, porque se puede molestar a otros usuarios. La verdad es que no sé si estoy cegado por mi falta de objetividad en un asunto que me afecta........pero es que no lo entiendo. Claro que entiendo que hay lugares donde un perro no debe ir suelto para no causar molestias.........por ejemplo por las aceras de una ciudad......que son para que transiten los peatones.....y comprendería que se restringieran los perros sueltos en lugares sensibles del parque (zonas recreativas, zonas con fauna o flora protegida, lugares destinados a ganadería......etc). Pero ¿es que no hay zonas idóneas para poder soltar a los perros sin que molesten a nadie?.....En fin......es tarde y no quiero irme a la cama enfadado......

No sé que opináis........pero va siendo hora de que los dueños de perros nos empecemos a organizar para defender nuestros derechos.......otros gremios están organizados y consiguen imponer sus intereses........las personas con perros somos gente tranquila.......pero ya va siendo hora de reaccionar un poco........¿no creéis?

Como educar a un cachorro

Quizás la sesión de adiestramiento que denominamos de "educación temprana", en la que visitamos el domicilio de un nuevo e ilusionado propietario de un cachorro, es la que más satisfacción nos produce debido a su alta eficacia. Cuando el cachorro llega a casa todavía estamos a tiempo de todo (el comportamiento de un perro está condicionado en un 40% por su genética y en un 60% por su educación).....y si conseguimos ser persuasivos y convencer al cliente para que siga nuestras pautas, al final obtendrá el perro con el que sueña y con el que disfrutará largos años.

Y es que si hacemos las cosas bien desde el principio, todo es mucho más sencillo.

Pero las pautas que damos para la educación del cachorro, necesariamente han de adaptarse a distintas variables:

• variables del perro: raza, temperamento, tipo de crianza que tiene, tamaño.........
• variables del ambiente: piso o parcela, tiempo disponible para paseos, lugares de paseo......
• variables del dueño: objetivos (compañía, agility, canicross....), temperamento del dueño, conocimientos y experiencia del dueño.......

En función de todas estas variables las pautas serán unas u otras. Por ejemplo, cuando la ONCE deja uno de sus futuros perros guía en manos de una familia durante el primer año, les indica en las pautas la prohibición de usar pelotas para jugar........debido a que, en un perro guía, interesa tener inhibido el instinto de caza o persecución hacia objetos en movimiento.......

Por lo tanto, sin ánimo de dar pautas concretas, hacemos un breve repaso sobre los temas que tratamos en estas sesiones de educación temprana para cachorros, y que desarrollamos a lo largo de las dos horas de visita:

• Socialización: se refiere a la habituación del cachorro a los distintos estímulos que se va a encontrar en su devenir diario.....haciendo especial hincapie en la socialización con otros perros y con personas extrañas y niños (principales detonantes del miedo agresivo en el perro adulto). Esta habituación debe adaptarse al tipo de perro, puesto que, por ejemplo, ir con un cachorro a la puerta de un colegio para rodearse de niños ávidos por tocar al pequeñajo puede ser una buena idea o una pésima idea (dependerá del temperamento y sensibilidad del cachorro).......por lo tanto, la socialización a de hacerse con cabeza si no queremos conseguir el efecto contrario (que el perro se sensibilice y adquiera miedos irreversibles en el futuro). 
• Conducta higiénica.......uno de los problemas que más acucian a algunos dueños, y una de las cosas que menor importancia tienen si se enfoca de manera adecuada. Aquí lo que influirá mucho será el tipo de ambiente y la disponibilidad en tiempo del propietario.......haremos una entrada específica sobre este tema. 
• Juego......¿es bueno jugar?: para responder esta pregunta primero hay que saber el tipo de objetivo que buscamos con el perro......en cualquier caso, el juego siempre ha de ser reglado. El juego es importante en los animales sociales porque es el lugar donde ensayan conductas, relaciones, pautas sociales.......en el juego el perro sacará conclusiones sobre la relación con su dueño......y es importante además que el perro juegue "con cabeza" o pensando.....porque el juego mal entendido puedo provocar en el perro nerviosismo, excitación, ansiedad.......Por lo tanto.....mejor no jugar que jugar de mala manera. 
• Ansiedad por separación......uno de los problemas que más consultas generan para el profesional.....y que es muy sencillo prevenir a edad temprana. Tan solo tendrás que generar en tu cachorro sentimientos de autonomía y no de dependencia.......evitando las conductas dependientes (como seguirnos a todas partes) y reforzando las conductas más autónomas (como permanecer tumbado aunque salgamos de la habitación). 
• Correcciones y comunicación: el cachorro va a tratar por todos los medios de entendernos y de integrarse en el nuevo núcleo social al que ha llegado. Si somos conscientes de este hecho y tratamos de ponerle las cosas fáciles (siendo claros), todo fluirá e irá cubriendo sus etapas de desarrollo sin mayores problemas. Para empezar: deberemos tratar de establecer un código de comunicación con el perro que usará toda la familia. Son cuatro palabras (que no me detengo a explicar aquí porque sería largo y lioso sin poder verlo en la práctica.......pero que tratarán de informar al perro de cuando lo hace bien, de cuando lo hace mal pero no estamos enfadados, y de cuando lo hace mal e implica nuestro enfado). Y también deberemos aprender cuando y como se puede corregir a un cachorro...
• Enseñanza de acciones.......como el sentado, el tumbado, el junto.........esto es totalmente irrelevante con el cachorro (incluso diría que contraproducente, por muy común que sea que empecemos a enseñar al cachorro a dar la pata casi desde el primer día que llega a casa). Aunque si enseñamos desde el principio la llamada (la orden más importante en el perro y que nosotros desarrollamos a lo largo del primer año, para conseguir un perro adulto con una llamada muy segura). Es muy importante trabajar sobre lo que pasa en la cabeza del perro. Comenzar a pedir cosas al cachorro ofreciendo un pedazo de salchicha puede conseguir resultados aparentes (el perro se sienta, viene, da la pata....), pero lo hace ha cambio de un premio que le ofrecemos. En realidad estamos construyendo un tipo de relación social basada en el premio (una especie de soborno).....a la larga el perro joven empezará a valorar cosas que le ofrece el ambiente (olores, otros perros, gatos....) y dejará de obedecer a un "pobre" dueño con un trozo de salchicha en la mano.....("total.....todos los días me dan de comer"...pensará el perro). No digo que no haya que usar refuerzos.....sino que deben usarse con moderación y conocimiento....y que el perro, finalmente, debe obedecer como parte de la integración en su grupo social, como muestra de respeto y confianza con su dueño......y todo esto es un proceso que se consigue en la interacción diaria con el cachorro. .
• Conducta higiénica: Siempre me ha llamado la atención la cantidad de gente que nos llama motivada por esta cuestión........porque la verdad es que debería ser lo de menos.....solo con un poco de paciencia y comprensión, la mayoría de perros en poco tiempo están haciendo sus cosas en la calle........en cambio, aquellos dueños que se empeñan en corregir, regañar por ensuciar....etc, convierten lo natural en problema.....a veces complicado de corregir. 

 Resumiendo......en esta fase el perro tiene mucho que aprender........debe aprender que es un perro con identidad propia, con un lenguaje específico necesario para comunicarse con los de su especie, con unas características de adaptación únicas que le permiten integrarse en grupos sociales interespece, debe aprender a entendernos, que tipos de comportamiento son admisibles en el grupo social que le acoge y cuales no, debe aprender a gestionar sus emociones (autoregularse para no abalanzarse sobre las visitas cuando lo embarga la alegría, o para no agredir a otro perro cuando lo domina el miedo)........en fin.....tiene mucho desarrollo por delante y nosotros tenemos que poner las condiciones para que este desarrollo se vaya produciendo de manera adecuada.

Juan Carlos Aparicio

¿nos gustan los perros?

Cada vez tengo más la impresión de que el amor por los perros se está convirtiendo en algo ficticio......Cada vez creo que más personas se enamoran de una "imagen" creada sobre el perro que no se corresponde con lo que realmente es este animal........

¿Que resultado tendría una encuesta sobre la cuestión?.......¿por qué le gustan los perros?......si preguntásemos esto a los dueños de un can creo que las contestaciones fluctuarían entre cualidades como: cariñosos, alegres, bonitos, fieles, leales, compañía.......pero ¿todas estas son realmente cualidades perrunas?....y ¿donde está el perro en este tipo de respuestas?.....¿alguna respuesta incidiría en aspectos como: carnívoro, dinámico, trotador, incansable, carroñero, resistente, instintivo, impulsivo, ladrador, olfateador, adaptable, sociable, rápido.....?. Estas si son cualidades objetivas de los perros sobre las que nadie incide......y vuelvo a preguntar ¿nos gustan los perros?......

Mi profesión me obliga a tratar muchos casos de perros con "problemas" de comportamiento. En la gran mayoría de los casos uno de los factores es un dueño que no respeta la condición de perro de su compañero. Los perros son perros........y son maravillosos tal cual son.......pero no hablan, no valoran, no moralizan.....y no necesitan lo mismo que nosotros.

Mi abuelo era un gran amante de los animales en general y del perro en particular........pero no se metía el perro en su cama, no le daba de comer en su cocina, no le daba besos, no le acariciaba continuamente o no practicaba con él dogdancing.........Para mi abuelo el perro era un perro.....daban juntos largos paseos por el campo y se iban juntos al huerto, al río, a por caracoles o a limpiar los establos......El perro de mi abuelo no tenía ansiedad por separación, no ladraba sin motivo, no saltaba a saludar como un loco, no pedía todo el tiempo que jugaras con él........Aunque sí......se revolcaba en estiercol, comía lo que pillaba, perseguía a los conejos o se escapaba tras una hembra en celo.......

Claro.......los tiempos han cambiado......la función del perro también.....nuestro entorno no digamos......pero ¿como le están sentado todos estos cambios a nuestros perros?.......creo que, hoy más que nunca, un dueño responsable tiene que tener mucha formación......porque tiene el reto de vivir en armonía con un animal que, contrariamente a lo que pensamos, no ha nacido para complacernos, para darnos cariño, para hacernos compañía o para ser amigo de los niños........Nuestra mascota es un animal descendiente del lobo con cualidades asombrosas, aptitudes innatas para adaptarse y necesidades muy diferentes de las que solemos pensar.

En Family Dog trataremos de ayudarte en este reto.

Cachorros y socialización

De todos es sabido lo importante que es la etapa de cachorro para un perro y lo que marca su posterior temperamento y personalidad de adulto. La infancia del perro es corta y debe aprovecharse al máximo, puesto que no tendrá más oportunidades de enfrentar los estímulos que le rodean con el espíritu curioso, desenfadado, atrevido y alegre que caracteriza a los cachorros.

Sin excepción, los perros que sufran un ambiente pobre en estímulos durante su fase de socialización, tendrán un temperamento inseguro, tímido, inseguro........y, con mucha probabilidad, desarrollarán problemas de conducta relacionados con el miedo (como la agresión o la fobia).

La fase de socialización es corta. Aunque no se ponen de acuerdo todos los autores, se puede asumir que abarca entre el mes o mes y medio y los 4 meses. En este periodo el cachorro debe exponerse, conocer y superar, el mayor tipo de situaciones posibles (por ejemplo, la ONCE, cuando deja a sus futuros perros guía en manos de una familia, les facilita un carnet o salvoconducto que les permite llevar al perro a lugares públicos como cines, autobuses, centros comerciales.......con el fin de que el cachorro se habitúe a todo tipo de ambiente).

En otro momento hablaré sobre como hacer una buena socialización........pero ahora me interesa hacer notar como este periodo coincide con la etapa de restricción de salidas por prescripción veterinaria. Y es que son todavía muchos los veterinarios que recomiendan mantener recluido al perro hasta completar su ciclo de vacunación.......y aunque desde el punto de vista de la salud sea una pauta útil, creemos que desde el punto de vista psicológico tiene graves inconvenientes (son muchos los perros que se sacrifican cada año por agresión y otros tipos de "malas conductas" que provienen de una deficiente socialización).

También es verdad que cada vez hay más veterinarios concienciados que abogan por buscar un equilibrio entre ambas necesidades del cachorro (la salud física y la salud mental). El riesgo de contraer una enfermedad (parvovirus principalmente) es muy bajo si llevamos al cachorro a lugares limpios y donde estemos seguros de que los perros que lo frecuentan están vacunados. También podemos llevarlo a lugares concurridos teniendo la precaución de llevarle una especie de alfombra donde depositar al cachorro, de modo que no tenga contacto directo con el suelo (ejemplo: vete a la entrada de un centro comercial y acomódate con tu cachorro sobre una manta.......deja que vea a la gente entrar y salir.......trasmite la tranquilidad de quien sabe que no corre peligro alguno.......y permite que la gente que lo desee lo salude.....este será un buen ejercicio para tu cachorro.....sin duda).

Las clases para cachorros, donde juegue con otros cachorros de su edad, que también tienen el correspondiente control veterinario, es otra excelente idea para socializar a tu perro.

Socialización...........no lo olvides..........es muy importante.

Desencanto con el adiestramiento y los adiestradores.

Cada vez me preocupa más comprobar que mucha gente queda desengañada tras la consulta a un profesional del adiestramiento o la corrección de conducta canina. Es habitual encontrarse con casos que ya han pasado por varias manos.....o con dueños que aseguran que no les ha servido de nada contratar los servicios de un profesional.

Es verdad....no he realizado ningún estudio y solo es una percepción subjetiva. No obstante, me preocupa porque cada desengaño supone una mala publicidad para todo el gremio....y estamos ante una profesión joven que todavía lucha por consolidarse.....cosa que hará solo en la medida que demuestre su eficacia y utilidad para los propietarios de perros.

Sin entrar en muchas profundidades......se me ocurren varias razones por las que es posible que los resultados obtenidos por los educadores caninos no sean del todo satisfactorios:

• Súbita superpoblación de profesionales caninos. La crisis ha golpeado con fuerza a muchos sectores económicos, pero ha favorecido a algunos. Este es el caso de la formación.....y en concreto, la formación relacionada con el comportamiento canino ha tenido un auge espectacular en los últimos años (personas sin trabajo buscan salida laboral en un ámbito con proyección y que atrae muchas vocaciones). Sin criticar la formación , que siempre es deseable, hay que decir que los cursos suponen solo el comienzo teórico que puede guiar los primeros pasos en el conocimiento profundo del perro. Si añadimos, además, que este tipo de formación no está regulada en España y que cada empresa privada otorga la titulación que considera, tenemos que personas recién llegadas el mundo canino, en 6 fines de semana consiguen un títulos de "adiestrador profesional", "técnico en corrección de conducta", "psicólogo canino", "especialista canino"...etc.......Resultado: superpoblación de adiestradores con una formación concisa y concreta y sin conocimientos profundos de lo que, realmente, es un perro. 
• No diferenciar adiestramiento de educación. Ante el creciente número de perros que generan problemas de conducta en la convivencia diaria, surge una nueva necesidad y servicio demandado por los propietarios de un perro: la corrección de conductas inadecuadas. Ante esta situación, el servicio fue asumido, naturalmente, por adiestradores que ejercían su labor en distintas disciplinas caninas (perros de utilidad, perros deportivos....etc). Estos profesionales tenían conocimientos acumulados en torno al aprendizaje de los perros.......sin tener que enfrentar, realmente, problemas cotidianos para un propietario (ansiedad por separación, miedo a otros perros, agresividad canina.....). Ante estos problemas el adiestrador siempre solía dar la misma receta; adiestramiento.....pensando que enseñar ejercicios (sentado, tumbado....) iba a solucionar el problema de conducta (muchas veces dominado por una emoción).........pero resulta que esto no es así casi nunca (el adiestramiento puede ser una ayuda solo en algunos problemas concretos). 
• Limitación económica y temporal. En muchas correcciones de conducta serían necesaria una formación adecuada de perro y dueño.....y este tipo de formación podría requerir una cantidad de tiempo y recursos (sesiones) que lo hace inviable. Esto puede obligar a medidas de compromiso, que sabemos no serán efectivas a corto plazo, que permitan llegar a resultados en el caso de los dueños más pacientes.......mientras que otros abandonaran el tratamiento antes de que este haya concluido.....

Estas serían algunas de las causas que determinan unos malos resultados en los tratamientos. Sin embargo el dueño de un perro tiene maneras de seleccionar entre el marasmo de información que recibe, que profesional le puede ayudar mejor en la resolución de su problema. La mayoría de mensajes que recibo lo único que preguntan sobre nuestros servicios es: su precio.........y he de suponer que serán personas que están haciendo la pregunta entre todos los profesionales que pueden, para decidir finalmente el adecuado, en función de ese sólo parámetro: el precio. Naturalmente, el mejor precio lo podrá dar la persona que menor desplazamiento tenga, que menos cargas económicas o más necesidades de trabajar tenga.....etc. Nada que ver con la calidad de su trabajo.

Me parece que lo ideal sería tener un primer encuentro con el profesional y poder valorar personalmente si nos satisface su mensaje, filosofía, técnica, comunicación, trasmisión........Si no ofrece una primera entrevista gratuita, podemos hacer algunas preguntas clave que nos indiquen el tipo de trabajo que realizará con nustro perro:

• ¿cuantas sesiones?: cuidado con los que fijen un número de sesiones sin haber visto el perro. Son tantas las variables que intervienen que resulta imposible predecir a priori. Otra cosa es aventurar un número de sesiones, pero aclarando que se basan en la experiencia con casos similares y sin cerrar el número de sesiones. 
• ¿que técnica?: Para mi un buen profesional no se cierra o ciñe a una sola técnica......sino que debe conocer muchas y aplicar la más adecuada en función de: el problema, el perro, el dueño. No creo que haya una técnica perfecta o superior a las demás. No obstante, si tienes claro que sólo admitirás un tipo de trabajo con tu perro (por ejemplo: buscas algún especialista en clicker), la pregunta limitará enormemente la búsqueda. 
• ¿que adiestramiento tienen sus perros?: a mi me parece increible que muchas personas que se dedican a aconsejar o dirigir a otros en el adiestramiento de sus perros, luego resulta que no tienen perro o que no practican con él ninguna especialidad. Para mi cada especialidad aporta conocimientos importantes sobre los perros. Cuantas más especialidades practique el adiestrador más versátil y profundo será su conocimiento. 
• ¿que formación?. En España todavía no hay titulaciones homologadas. En 2011 se publicaron en el BOE los requisitos que se exigirá cumplir a las personas que quieran ser adiestradores. Preguntar sobre si se cumplen estos requisitos puede ser excesivo.......pero no está de más preguntar por la formación del adiestrador que nos visitará. 

La llamada (....2)

De manera natural....al igual que haría con su madre....el cachorro necesita una base segura desde la que explorar el mundo......La madre es ese lugar seguro al que el cachorro regresará al menor atisbo de peligro. Este fase es muy aprovechable por el dueño sensible a los requerimientos de su cachorro, que aprovechará para llamarle justo antes de que el cachorro va a venir o en momentos en los que se sabe que el cachorro vendrá (cuando nos mira, cuando aparece un ruido molesto....etc)......En estas circunstancias es sencillo ir introduciendo el comando de llamada para que el cachorro lo vaya asociando......y, por su puesto, una vez que el cachorro ha venido se le felicita (levemente) y se le vuelve a dejar libre (no hay nada más nefasto para enseñar a no venir que el llamar al cachorro para retenerlo, ponerle la correa, terminar con la diversión.......).

Si no tenemos muchas tablas en el manejo de cachorros.....en esta fase nos podemos ayudar con una correa de 10 metros....que nos servirá para asegurarnos de que el cachorro viene en las llamadas (si...lo sé....no es muy sofisticado........pero los perros aprenden mejor por inducción y no por deducción......que le vamos a hacer). La idea es simple.....se le lleva al cachorro a un lugar despejado y tranquilo.....y se le suelta con correa de 10 metros arrastrando (vale cuerda de tender la ropa)......de vez en cuando (cada 5 o 10 minutos) nos colocaremos en el extremo de la correa y le daremos el comando (sultan....aquí), al mismo tiempo que tiramos con la correa hacia nosotros para hacerlo venir.......se le felicita y, por supuesto, se le libera para que siga su paseo........

Con el tiempo, el cachorro se da cuenta de que ir a la llamada es algo agradable, no supone el final de diversión.......y pone muy contento al jefe......

Pero podemos hacer más cosas si somos listos y nos ponemos en el lugar del perro: podemos llamarle justo antes de que llegue ese perro con el que se lo pasa tan bien si nuestro sultán no lo ha visto aún (viene a la llamada y como premio recibe jugar con su mejor amigo), podemos esparcir por el suelo unas "chuches" y llamarle para que venga a descubrir lo que hemos encontrado ("y yo que pensaba que no tenías olfato...:" pensará)....

En definitiva......la llamada tiene que ser algo deseable para el perro y no algo aburrido, indeseable, evitable...etc.

La llamada

Como decía un amigo: un perro adiestrado es un perro que viene a la llamada.......y si te trae la pelota ya es un extra. Es verdad.....la llamada es la orden más importante que debe conocer un perro y la que le permite ganar enormemente en calidad de vida, puesto que su dueño podrá llevarle y soltarle por muchos más lugares.

Una buena llamada se construye progresivamente desde que el perro es un cachorro y la palabra clave en este sentido es CONFIANZA. El perro debe acudir a su dueño cuando le llaman con confianza. Lamentablemente es muy sencillo destruir esta confianza del perro. La confianza es algo muy frágil.

No hay que confundir confianza con vínculo o afecto. Todos los perros quieren a sus dueños.......pero no todos los perros confían en sus dueños. Suelo encontrarme con perros que no entienden a sus dueños, que los tienen por impredecibles, injustos, inestables........ante un dueño así, el perro suele reaccionar con la misma moneda: nerviosismo, inestabilidad, inquietud......

La confianza del perro nos la ganamos en cada segundo que estamos con él......a base de no castigar sin sentido, de no hablar de más, de no confundir, de no excitar a lo tonto......Me gusta este decálogo del buen guía (o lider....si lo prefieres):

Un buen líder es justo.

Un buen líder nos proporciona recursos (alimento, refugio etc…)

Un buen líder es alguien en quien podemos confiar. La confianza es básica para que se establezca una buena relación (alguien que traiciona nuestra confianza jamás será considerado por nosotros un buen líder). En mi opinión es uno de los puntos que más me gusta trabajar porque es de los más importantes. Piensa en lo que significa para ti poder confiar o no poder hacerlo en alguien –ellos sienten lo mismo-.

Un buen líder siempre esta cuando lo necesitamos.

Un buen líder es ingenioso y divertido.

Un buen líder dedica tiempo a sus seguidores.

Un buen líder dirige conductas mediante refuerzo positivo.

Un buen líder confía sus seguidores.

Un buen líder corrige conductas no deseadas con paciencia.

Las decisiones del líder no se discuten, se acatan, porque nuestro líder es justo y podemos confiar en él.

Bueno.....por todo esto.....la llamada no es una orden que se deba trabajar en cortos entrenamientos de obediencia......debemos trabajarla desde cachorro y en diversidad de circunstancias.......(continuo en otra entrada....)